La Delegación había anunciado que permitiría concentraciones con una previsión de asistencia menor a 500 personas, que ya no serán posible con esta prohibición.
El delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, ha basado su decisión de vetar cualquier acto público en la situación de riesgo extremo por la pandemia de covid-19 que padece Madrid, con una incidencia superior a 250 casos por cada 100.000 habitantes.
